La necesidad de tu cliente existe para ser satisfecha
“La necesidad no conoce leyes” (San Agustín)
DATO: 7 de cada 10 españolas tienen un vibrador en su mesilla de noche y en España este mercado factura casi 1.000 millones de euros anuales.
LA NECESIDAD DE LAURA
Hoy contaré la historia de Laura, amiga de mi mujer.
Laura tiene 39 años y tras 8 de matrimonio y 2 hijos, decidió divorciarse hace algo más de 2, por lo de casi todos: “porque siempre es lo mismo”.
“Un mismo”… no bueno.
Porque… si fuera un “siempre lo mismo”, bueno, lo inteligente es cuidarlo, hacerlo crecer y disfrutarlo.
No era el caso evidentemente.
El detonante final para su ruptura matrimonial fue lo que a mucha gente termina por darle consciencia de que lo suyo no funciona: el sexo.
Mejor dicho, la ausencia de.
La forma de verificar que una pareja está extinguida es preguntarle a sus miembros por la frecuencia de coitos.
La fórmula es tan sencilla como la de la energía de Einstein:
E = m · c2
Energía igual a: M (masa) por C (velocidad de la luz) al cuadrado.
Pues bien, la energía sexual es 0 patatero cuando en una pareja el amor ya no pesa nada y se multiplica por polvos a la velocidad de la luz, al cuadrado.
0 gramos de amor multiplicados por casi infinita velocidad en el polvo (tanto como que ni se ve, ni se siente) siempre dará:
0
Patatero.
No hay energía.
Sin energía no hay movimiento.
Sin movimiento no hay sexo.
«Sin sexo no hay vida«.
(Como en el anuncio para tíos que no trempan. ¡JAJAJA!)
Pues eso.
¿Y QUÉ NECESIDAD ERA ESA?
Total que Laura redescubrió al borde de los 40 la soltería que le llevó (los fines de semana que los niños estaban con papá) a prospectar el “mercado de hombres”.
Los primeros 6 meses fueron de locura porque a las ganas de… se añadían las ansias irrefrenables de libertad recién conquistada.
Varios amantes pasaron por sus sábanas pero el resultado era invariablemente el mismo.
– ¿Qué les pasa a los tíos, Gemma?
Le preguntaba Laura a mi mujer.
– ¿Qué les pasa a los tíos, Laura?
– Cuéntamelo tú a mí, le replicaba mi mujer.
– Pues eso.
– Pues eso, ¿qué?
– Que no aguantan.
-¿Que no aguantan, qué?
– Que no me aguantan, Gemma. Mi marcha.
– ¿Tú marcha? pero… ¿a qué te refieres, Laura?
– A mi ritmo. El mío. Mi ritmo sexual. El que yo quiero.
– El que yo necesito. El que me gusta y el que busco.
– Ay hija, Laura. Tú lo que pasa es que has estado en secano más de 2 años y ahora quieres que el campo seco te lo “inunden”.
¡¡¡JAJAJAJAJA!!!
– Que noooo. ¡Que no es eso! le replicaba Laura a mi mujer.
– Gemma que es que los tíos están como blanditos, nunca mejor dicho. Que yo NECESITO más.
(Risas estruendosas).
– ¿En serio? Pero eso como va a ser. Yo no sé de qué me hablas, Laura…
– Que sí Gemma, que los tíos son fusiles de un solo tiro y algunos incluso… hasta de fogueo. Que es un rollo. Que te lo digo yo. Que nosotras necesitamos más. Que a los 40 nosotras estamos pa´arriba y ellos están pa´abajo, y no hablo figurado, Gemma. Deben ser las hormonas o yo que sé, pero que a mí en la cama no me funciona ni uno.
– Bueno, Laura tú habla por ti, guapa. Que cada una tiene su vida…
(Qué grande mi mujer, siempre dando la cara por mi : )
Total, que Laura sufría una necesidad galopante por falta precisamente de buen corcel con el que galopar.
Y algo de razón debe tener Laura pues ahora que lo pienso ya son varias las veces que he escuchado a mujeres diciendo que lo que ellas necesitan es un auténtico hombre… “empotrador”.
Como si ahora de repente el chico de la Coca-Cola hubiese sido sustituido por el albañil o el encofrador.
LA NECESIDAD DE TU CLIENTE: TODOS TENEMOS UNA
Qué cosas.
Cómo cambian los tiempos.
Las expresiones.
Pero NO las necesidades.
La necesidad de tu cliente tampoco.
Las necesidades humanas han sido siempre las mismas.
En esto que un día Paqui (nuestra vecina de rellano) le cuenta a mi mujer que va a montar una sesión de tupper-sex en su casa.
Que tiene una amiga que se dedica a ese negocio y que la invita a ella y a quien quiera traerse a la reunión.
Y mira tú por donde… que tenemos a Laurita con las necesidades que la tenemos…
Así es que todas a casa de Paqui.
Al cónclave de mujeres ávidas de instrumentos sustitutivos para la obtención de “energía” con o sin la aplicación de la ecuación sexual de Einstein.
En búsqueda de la necesidad a satisfacer.
LA NECESIDAD SE CUBRIÓ: LA REUNIÓN FUE UN ÉXITO
Absoluto.
Apoteósico.
Sólo decir que el tabique de mi comedor linda con el salón de Paqui y la tarde de la reunión el estruendo de risas y gritos fue insufrible.
Nada nuevo bajo el sol.
No hay secretos.
Nada en lo que tú que me lees hayas pensado antes, es nuevo.
Otro antes que tú, ya lo pensó.
El mundo cambia su aspecto y hay otras “formas de hacer”, pero las necesidades son las mismas.
Idénticas.
Las de la mujer de la cueva y las de Laura… (en esencia, las mismas…)
La necesidad impulsa con una determinación que no logra igualar jamás ningún afán de creatividad.
Donde hay necesidad existe iniciativa y entonces, surge el cambio.
Las personas necesitamos cosas.
Incluso algunas, que en ocasiones no sabemos ni qué existen.
Esas otras cosas que nos las descubren otros y entonces, zasca, nos volvemos adictos.
(Como le pasó a Laura con “lo suyo” la tarde de la reunión del tupper sex).
Ella descubrió y cambió.
Descubrió el subcionador de clítoris…
Y cambió. ¡Ya te digo si cambió!
A la porra la búsqueda de amantes ocasionales, el cuadrar la fórmula de Einstein o la profesión de sus novios.
Lo mismo le daba ya encontrar empotradores, encofradores, butaneros u oficinistas.
LA NECESIDAD DE TU CLIENTE BUSCA SER SATISFECHA
Los humanos descubrimos necesidades y desde ese mismo instante ya hacemos todo lo posible por lograr satisfacerlas.
Atención al dato.
Consoladores de piedra existían y se han descubierto con antigüedad superior a los 30.000 años.
¿Cómo se te queda el cuerpo?
Pues bien, sigamos con el sex-meeting.
En la reunión se presentó el producto estrella del momento.
¡TACHÁN, TACHAN!
Sí, ya lo he anticipado…
El succionador de clítoris.
¡¡¡Wooooowww!!!
¿Y quién se lo compró sin ni tan siquiera preguntar?
¡NO!
¿Mi mujer?
¡No!
¡Que no!
¡Qué fue Laura!
Que sí, que fue Laura.
Lo juro.
Pero claro, mi mujer se quedó tan intrigada con el “trasto”… que le faltó tiempo para quedar con Laurita y enterarse cómo había “funcionado” el cacharro…
Bueno, en realidad, gracias a todo esto, estoy aquí yo escribiendo todo esto y tú leyéndolo y disfrutándolo.
Continuamos.
LA NECESIDAD DE TU CLIENTE DEBE SER BIEN SATISFECHA
Laura a mi mujer:
¡¡¡B-R-U-T-A-L, nena!!!
El Satisfyer Estimulador que así se llama el trasto es…
¡IN-DES-CRIP-TI-BLE!
Nada parecido a cualquier otro de esos aparatejos anteriormente inventado por el ingenio humano…
Atención…
Que va ya por la versión 2.0 Pro.
Es… ¡la leche!
Su capacidad para lograr que la fórmula de Einstein arroje la mayor energía sexual no necesita para nada de la variable o componente del amor.
El subccionador clitoriano funciona con electricidad y la sola corriente sume a la usuaria en una torrentera de “correntera” indescriptible, nunca mejor dicho…
Bueno, y no es cosa de Laura en exclusiva y por aquello de su personal necesidad.
De eso, nada.
Sólo hay que atender a las usuarias del aparatejo, sus testimonios y la cantidad de recomendaciones para exprimir al máximo su “rendimiento”.
Los artículos de prensa que ha generado y el éxito de ventas en los portales de instrumentos sexuales, en especial en el portal de Amazon es, IMPRESIONANTE.
Total que el mundo cambia en las formas pero no en el contenido.
Que somos los mismos solo que nos presentamos distintos.
La esencia humana es siempre idéntica pero cada tiempo, cada momento y época, tienen su manera particular de representarse y expresarse al mundo: a la vida.
Consoladores han existido toda la vida del hombre.
Mejor dicho, de las mujeres.
Antes consolaban y ahora vibran pero sólo porque tenemos electricidad.
Salvo ese detalle, el fin es el mismo: dar placer a la usuaria satisfaciendo su NECESIDAD.
Como la comunicación humana.
Siempre ha existido y existirá.
El placer y la comunicación.
Humanas.
Sin embargo, las formas han cambiado: utilizamos otros soportes, otros medios, otros instrumentos y otras aplicaciones.
Pero la finalidad es: idéntica:
En comunicación:
Dar a CONOCER algo que nos INTERESA que otros
CONOZCAN
El mensaje como el placer es lo fundamental.
Es el fin.
Sólo cambian los medios.
El aparatejo con o sin electricidad.
La carta de ventas o la web con o sin COPYWRITING.
Con electricidad para hacer la experiencia más sublime, más intensa, más perdurable, más buena…
¡Más mejor!
LAS WEBS CON COPYWRITING, PARA EXACTAMENTE LO MISMO…
Hacer el mensaje, el contenido…la idea a transmitir…
¡Más mejor!
PARA SATISFACER NECESIDAD DE TU CLIENTE HAY QUE PENSAR DISTINTO
Y es aquí donde el COPYWRITING es una herramienta de máxima ayuda, ya que traduce la nebulosa inicial de pensamientos en algo tangible:
Las palabras, con las que puedes transformar el mundo y tu vida
El COPYWRITING transforma palabras en CLIENTES.
Más clientes suponen más beneficios.
Es una técnica de redacción que sirve para conectar con quien lee un texto.
Con persuasión.
La que necesitas para que los que te leen hagan algo que ellos quieren hacer y tú también quieres que hagan.
Ellos tienen una necesidad, igual que Laura.
Visitan tu web para ver si tú tienes la solución que andan buscando.
O quizás les sorprendes con algo que no habían pensado antes.
Igual que Laura acudió al tapersex y se dejó sorprender y enamorar por el “satisfyer”.
Los textos de tu web son tu comunicación con los que quieres que sean tus clientes.
De los contenidos de tu web dependerá que te abandonen o se “enamoren” de ti y «te lleven a casa»
No a ti…
A tu producto o servicio, claro.
Por todo esto el COPYWRITING en la época del covid-19 es esencial en los negocios online.
Para que esos negocios puedan crecer, generar autoridad de marca, logren crear vínculo con sus clientes y conseguir:
VENTAS
Así de simple.
Y para eso estamos nosotros.
Tú sólo debes explicarnos bien:
- Qué haces
- Qué elaboras
- Qué fabricas
- Qué servicios prestas
- Cómo lo logras y
- Quién eres
Del resto, es decir, de contarlo en tu web nos ocupamos nosotros.
De satisfacer la necesidad de tu cliente, te encargas tú, por supuesto.
El enfoque, las ideas, la creatividad, la seducción y la persuasión para que te lo compren con los ojos cerrados, las ponemos nosotros en:
TEXTOS EXTRAORDINARIOS Escritos para tu éxito
Como ayer los consoladores, hoy vibradores, ya, succionadores.
De piedra antes o incluso ahora, sólo que ahora los venden además como sanadores
Manuales o eléctricos.
Pero en esencia, nada nuevo bajo el sol.
Han existido siempre.
Se trata de atreverse a hacerlos de otra forma.
De una forma distinta.
Para cubrir otras necesidades.
Reales o inventadas.
Eso no importa.
Lo que importa es que el mundo no cambia en su esencia.
Sólo lo hace en sus formas.
Adaptémonos pues a las nuevas formas.
Descubramos nuestras NECESIDADES y las de nuestros CLIENTES.
Abordemos “nuevos placeres” y hagamos las cosas de otra manera para disfrutar y vivir, mejor.
Con COPYWRITING.
Aprendiendo a VENDER distinto.
A hacerlo mejor.
A disfrutar haciéndolo.
A explicarlo de otra manera y lograr un resultado mayor.
Ya no son de piedra.
Son eléctricos y mejores.
El placer y disfrute es mayor.
La necesidad de tu cliente es la misma
Haz que tu web te presente como una experiencia única, dispuesta a colmar todas las necesidades que tu cliente tiene, e incluso que aún no sabe que tiene.
Como Laura.
Pero para eso has de atreverte a presentarte de otra manera en tu WEB.
Tu producto o servicio ha de estar presentado de tal forma, que como Laura, tu CLIENTE se “enamore” y te ELIJA y decida quedarse contigo desde el primer momento.
¡Amor (o placer) a primera vista!
Si tú solo no sabes cómo hacerlo con los textos de tu WEB, nosotros podemos hacerlo por ti.
Esta genial el post. Saludos.